Español
Gamereactor
análisis
Pokkén Tournament DX

Análisis de Pokkén Tournament DX

El innovador juego de lucha de Pokémon vuelve con una edición definitiva que puedes jugar donde quieras.

Suscríbete a nuestra newsletter

* Campo obligatorio
HQ
HQ

Primero fueron los arcades nipones en 2015, luego fue Wii U en primavera de 2016 y ahora va a ser Nintendo Switch en pleno 2017. Llevar a los Pokémon al género de la lucha es algo que ha tardado muchos años en hacerse realidad de manera oficial, y de repente nos hemos topado con 3 años consecutivos que nos han demostrado que los combates de estas criaturas se adaptan perfectamente a un género que, por definición, encaja como un guante con uno de los conceptos clave de la franquicia: pelear.

Pokkén Tournament DX está a la vuelta de la esquina en Nintendo Switch. Este título que hace tan poco pudimos disfrutar en su predecesora vuelve con más personajes, novedades en sus modos y el gran atractivo de la portabilidad. Pero, ¿son suficientes estos cambios como para volver a hacerse con él?, ¿tiene el suficiente gancho para atraer al público que lo pasó por alto anteriormente? Esas inquietudes nos rondaban la primera vez que vimos a Charizard y Lucario pelear en la pantalla de la híbrida de la Gran N, y a cada partida se han ido esfumando con una facilidad pasmosa.

La principal diferencia de esta edición con respecto a las anteriores, además del factor portátil de la plataforma, es la cantidad de luchadores disponibles. Comparando con Wii U, aquí sí están Darkrai, Scizor, Empoleon y Croagunk; y comparando con el arcade, que sí los tenía, aquí está Decidueye, criatura de la séptima generación que se estrena en este campo de batalla. La plantilla de Pokémon para luchar ahora ronda la veintena, volviéndose todavía más completa.

Publicidad:
Pokkén Tournament DX

Todo lo demás permanece exactamente igual, y el ejemplo más claro está en el sistema de combate. Las peleas en Pokkén transcurren de manera muy diferente a lo que es habitual en los demás juegos de lucha. Reúne elementos que podemos ver en, por ejemplo, Naruto Ultimate Ninja Storm, con peleas en terrenos tridimensionales y total libertad de movimiento; pero también se acerca a lo común con enfrentamientos de desplazamiento lateral. Mezcla ambos elementos a través de lo que denomina sistema de fases: Fase abierta y Fase Duelo; y obliga a que el jugador aprenda a controlar los espacios en ambos escenarios.

Este mecanismo, que idearon Harada y su equipo para alejarse al máximo posible de la esencia de Tekken (aunque la referencia a la saga es evidente, el juego se llama Pokkén), puede ser un hueso duro de roer en la primera toma de contacto. Pero no nos equivoquemos, es un juego satisfactorio para el novato. Con machacar un poco los botones, el jugador tiene a su Pokémon haciendo piruetas, lanzando rayos y todo un festival de golpes y explosiones digno de un combate entre criaturas fantásticas; aunque no tenga ni idea de lo que está haciendo. Conseguir un resultado es fácil, y el juego se presta a la espectacularidad con una ejecución simple para el jugador; pero entender todas las mecánicas que se solapan no lo es tanto.

Pokkén Tournament DX no es un juego con el que puedas sentarte y empezar a jugar al momento si quieres saber lo que haces. Tiene una obligatoria fase de aprendizaje para entender los conceptos más importantes: uno, el triángulo de ataques; dos, el cambio de fase. Es más complejo que muchos otros títulos del género, aunque los "inputs" de movimientos se hayan simplificado casi al mínimo y los combos sean prácticamente automáticos.

Publicidad:
Pokkén Tournament DX

Dominando estas bases, se domina el grueso principal del juego; pero hay que añadir el conocimiento de los movimientos que cambian la fase, los ataques bajos, medios o aéreos, los Pokémon que funcionan mejor en las largas distancias que en las cortas (los tipos no cuentan, por suerte), el uso de los asistentes, el control de la Sinergia (medidor que se rellena en batalla, atacando o recogiendo unos símbolos), los Ultrataques... Sumando granito a granito se obtiene una montaña que el jugador descubre mientras combate y se estudia todos los tutoriales que hay, que no son pocos. No es algo difícil de aprender, aunque sí que requiere paciencia y estudio para medir cada milimétrica decisión durante la pelea.

Un sistema bien elaborado da forma a un juego de lucha con gancho, y contar con una buena plantilla también. Tiene que haber sido difícil montar un roster de 20 personajes cuando se parte de una base de más de 700 criaturas diferentes. Están extraídos de diferentes generaciones, algunos son mejores para las distancias, otros para el cuerpo a cuerpo y, aunque faltan algunos que parecían evidentes (ni Hitmonchan ni Hitmonlee, ¿estamos locos?), sí que hay experimentos interesantes. Jugar con Chandelure, Suicune o un Pikachu que se dedica a la lucha libre es la mejor forma de ver lo versátil que es el mundo de estos monstruos cuando se encara con un género tan antiguo. El problema es que sigue habiendo cierto desequilibrio ya existente en entregas anteriores. Mewtwo y Suicune siguen siendo auténticas máquinas de matar a distancia, y Gengar aún conserva su combo infinito.

HQ

La herencia de las entregas originales no es un cúmulo de bondades, también hay aspectos negativos. Su propuesta para un jugador sigue siendo la Liga Férrum, un sistema de liguillas simple a rabiar. La única pequeña motivación es cierta trama ligada a Mewtwo, que no hace más que alargar el tedioso proceso de ascenso entre clasificaciones de la liga. No hay un hilo conductor interesante, todo se limita a ganar combates para ascender puestos (con algún diálogo en medio), pasar a una ronda eliminatoria, ganar la final y luego un combate de promoción. Y luego, repetir lo mismo en la siguiente competición.

El único interés que tiene esta modalidad es servirte para mejorar tus habilidades o desbloquear piezas para personalizar a tu entrenador y paneles con ilustraciones. Ni siquiera sirve para conseguir nuevos luchadores porque están disponibles desde que introduces el cartucho por primera vez. ¿Para qué mantener idéntico un modo que no motiva, que no aporta algo de peso? ¿Por qué no haberle dado algo más interés que el mero afán por completarlo todo?

Quitando este "modo historia" insípido, todo lo demás encaja bien. La implementación de los nuevos combates 3 contra 3, aunque funcione por eliminación y no tenga sistema de asistencia, hace más largas y divertidas las batallas, y hasta recuerda ligeramente a las peleas clásicas de la franquicia por eso de elegir equipo, aunque con luchas que se deciden a tortas. Por el lado del online, aunque lo hemos probado menos de lo que nos hubiera gustado, ha demostrado funcionar bien; y las nuevas salas sirven para encontrar rápidamente a gente de nivel parejo para pelear. Un acierto aquí el ponerte a luchar contra la CPU en caso de no encontrar rival. Si peleas contra la máquina y aparece un combatiente, entras inmediatamente, evitando el aburrimiento de las largas esperas.

Con el salto a Nintendo Switch, los desarrolladores también han optado por implementar un modo a pantalla partida. Ahora que no hay un GamePad que haga de segunda pantalla para otro jugador, parece la mejor apuesta para el que quiera tener siempre la cámara a su favor, pero el resultado no es demasiado favorable. Unos márgenes superiores e inferiores reducen aún más la zona visible y además la tasa de frames pasa de los 60 a los 30. Jugarlo en Modo Portátil se hace bastante complicado por la falta de visibilidad y la pérdida de fluidez pasa factura. En un juego de lucha la respuesta a los controles y la velocidad deben ser perfectas, y cuando se pierde alguna de ellas, se nota.

Pokkén Tournament DX

Si se obvia esa opción y se recurre a la tradicional, Pokkén Tournament DX luce en todo su esplendor. Se ha dado un salto en resolución que podría notarse más de no ser porque la imagen sigue sin alcanzar la nitidez que debiera por razones que desconocemos, y eso que Switch ha demostrado ser soprendentemente capaz en temas de rendimiento. Lo que se sigue manteniendo férreo es la tasa de fotogramas por segundo, son 60 constantes y no han caído en ninguna de las partidas que hemos jugado, independientemente de la carga visual en pantalla. Con rayos, juegos de luces y todo lo que implican los exagerados movimientos especiales de los luchadores.

La espectacularidad de estas peleas sobresale cuando pasas a jugar con Switch al estilo portátil. Esa falta de nitidez sigue presente, pero no es molestia cuando tienes la posibilidad de tener un 1 vs 1 con quien quieras y cuando quieras. El factor portabilidad le sienta muy bien a Pokkén, y mantiene también otra idea arraigada a la IP, el jugar con otros tanto en casa como fuera de ella.

Todos los que nos iniciamos con esta saga hace más de 20 años hemos fantaseado alguna vez con un juego como este. Los que pasábamos los recreos entre bocadillos y Cable Link para nuestros piques estamos ante una ocasión perfecta, ahora podemos llevarlos a un nivel donde prima más la habilidad que la estrategia. Tenemos la edición definitiva de un título con unas muy buenas ideas detrás, que parte de una atrevida innovación en un género tan mascado como es la lucha, y lo hace con un sistema pensado por y para estos monstruos de bolsillo.

Con la popularidad de la actual plataforma de Nintendo, el atractivo de la eternamente joven IP de Pokémon, lo adictivo de su resultón sistema de combates y la posibilidad de echar partidas con amigos donde te dé la gana; Pokkén Tournament DX es la oportunidad perfecta para disfrutar de los combates más emocionantes y vibrantes de la franquicia. Si no lo jugaste en Wii U y te parecía interesante, no lo dudes. Si lo tenías y te gustaba, tampoco.

HQ
Pokkén Tournament DXPokkén Tournament DX
08 Gamereactor España
8 / 10
+
Plantilla de luchadores ampliada, portabilidad que encaja como un guante, mecánicas que esconden mucha miga, ¿quién no ha querido alguna vez pelear como un Mewtwo o un Gengar?
-
Desequilibrio con algunos luchadores del roster, la Liga Férrum tiene aún menos atractivo que antes, el modo a pantalla partida es incómodo (en portátil más todavía).
overall score
Media Gamereactor. ¿Qué nota le pones tú? La nota de la network es la media de las reviews de varios países

Contenido relacionado

0
Pokkén Tournament DXScore

Pokkén Tournament DX

ANÁLISIS. Autor: Juan A. Fonseca

"It's a good port of a good fighter, expanding on what has come before at the same time as utilising the versatility of the Switch."



Cargando más contenido