Análisis de Trackmania

Ubisoft Nadeo ha vuelto con una versión renovada de Trackmania. Sigue siendo el juego que todos amamos y conocemos, pero con algunas mejoras y otras novedades que a mucha gente no le van a gustar. Ahora mismo, tras jugar unas cuantas horas, puedo decir que tiene el espíritu de un Trackmania pero, ¿es suficiente para justificar una nueva versión?

Trackmania ha estado siempre presente durante toda mi vida en lo que a videojuegos se refiere. Cuando salió el primero en 2003, pasaba horas intentando mejorar mis tiempos por vuelta. Podía llegar a ser muy frustrante, pero una vez que lograba batir mi récord personal jugando un mismo circuito dos horas seguidas me invadía una tremenda sensación de satisfacción. El juego siempre ha sido muy adictivo, algo que no ha cambiado en 2020. Para ser honestos, este análisis debería haber estado listo hace unos días, de no ser porque he tenido que volver a jugar todos los circuitos unas cuantas veces para conseguir la medalla de oro.

Pero eso es algo que siempre está presente en Trackmania. Incluso contando de salida con un número limitado de circuitos oficiales (incluyendo 50 circuitos de entrenamiento), puedes rejugarlo muchas veces ya que sólo tienes que dedicarte a hacerlo cada vez mejor. Y si encima un amigo también lo intenta, eso significa que voy a jugar incluso más. Trackmania te da una sensación de velocidad como ningún otro juego; con una gran tracción (al menos en asfalto) y potenciadores de velocidad por todos lados. No hay ninguna parte en los circuitos en la que te puedas relajar. Debes estar completamente concentrado en todo momento si tu objetivo es dar con la mejor trazada y coger los atajos que te permitan hacer el mejor tiempo posible.

La serie empezó centrándose en carreras en asfalto, pero a lo largo de los años ha ido añadiendo circuitos de tierra y coches de drifting. No encontrarás estos últimos en la versión de 2020, pero sí que están incluidos varios circuitos en tierra y césped además de una nueva superficie, el hielo. La diferencia entre asfalto y hielo es básicamente como la diferencia entre el cielo y el infierno, y no me costó darme cuenta de que prefiero el asfalto. Dicho esto, hay que decir que conducir sobre hielo aporta un nuevo enfoque a la hora de jugar y una nueva serie de habilidades que debes dominar. Lo que me faltaba, algo que me haga aún más difícil dominar el juego por completo...

Desde el punto de vista audiovisual no es muy diferente al resto de versiones anteriores. El juego luce muy bien de por sí, con algunas mejoras a los entornos. Los sonidos que emiten los coches y los gráficos ayudan a crear una gran sensación de velocidad. En cuanto a la música, es la misma que recuerdo de los anteriores Trackmania (en mi caso supuso que me pusiera Spotify enseguida para escuchar mis canciones favoritas y así intentar conseguir los mejores tiempos por vuelta)

Una de las cosas más importantes de la franquicia Trackmania es el contenido creado por los usuarios. La gran cantidad de circuitos construidos y editados por jugadores es la principal razón por la que Trackmania 2 sigue vivo dentro de la comunidad. En esta edición de 2020, Ubisoft Nadeo ha incluido unas cuantas nuevas herramientas para el editor de circuitos, algo que están disfrutando los mejores creadores. Tras solo una semana desde su lanzamiento, ya he podido probar unos cuantos circuitos increíbles hechos por otros jugadores además de los muchos otros que se crean a diario. El editor que se usa para decorar tu coche es un caso aparte, está lleno de errores y es muy difícil de controlar con eficacia. Estoy deseando ver otro editor hecho por la comunidad en un futuro próximo, pero de momento habrá que tener paciencia para crear buenos diseños con las herramientas a nuestra disposición.

Si ya es divertido batir tus propias puntuaciones máximas una y otra vez, lo es aún más batir las de tus amigos. Pero a no ser que estéis dispuestos a pagar el juego a precio completo, deberéis ir apuntándolo en una hoja de cálculo (o algo parecido) para poder llevar la cuenta de los mejores tiempos. Tuve acceso a la versión "Club" del juego, lo que me permitió crear un espacio social. Sin embargo, mis amigos tenían la versión gratuita, por lo que no podían unirse a mi club para comparar los tiempos. Esta fue la parte más frustrante de toda mi experiencia con el juego.

Ubisoft ha tomado un nuevo rumbo en lo que se refiere al modelo de venta. Puedes obtener el juego de forma gratuita si solamente quieres jugar a los circuitos estándar o puedes adquirir la versión normal si quieres quitar los anuncios, crear circuitos, crear y guardar aspectos para tus coches o unirte a salas públicas del club. Sin embargo, si quieres obtener la experiencia completa, necesitas la versión Club, que básicamente cuesta lo mismo que un juego completo e incluye una suscripción de 3 años. Los precios no son disparatados, pero ha creado revuelo en la comunidad ya que parece que los desarrolladores lo han convertido en un juego basado en las suscripciones.

A fin de cuentas, Trackmania 2020 es un buen juego de carreras como lo era en su día. Por desgracia, le falta contenido si no tienes la versión Club. Tengo curiosidad por saber si esta versión será tan longeva como sus predecesores teniendo en cuenta su formato a base de suscripciones. Los editores incluidos son muy detallados pero difíciles de dominar, por lo que hace falta mucha paciencia para crear buenos circuitos y más aún si quieres hacer diseños para tu coche. Pensándolo bien, ¿quién juega Trackmania sin estar armado de paciencia?

A pesar de la falta de contenido en la versión gratuita, me resulta difícil ser muy crítico por el hecho de no dárnoslo todo gratuitamente, especialmente cuando lo he pasado tan bien.