Battlefield 1 - impresiones de la beta

Cuando EA y DICE anunciaron Battlefield 1 tuvimos sensaciones contrapuestas. Realmente más de las que podría esperarse de nosotros con el anuncio de un nuevo Battlefield, ya sea positivo o negativo, dado que es esta serie siempre ha sido una apuesta segura. Porque, para bien o para mal, sabes de antemano qué es lo que te van a ofrecer: grandes batallas y una capa fina de narrativa.

Pero el Sinaí como campo de batalla es una buena demostración de lo que ofrece BF1. Quien se estuviera esperando meterse en una Europa repleta de barro y rasgada por trincheras se habrá llevado una grata sorpresa al comprobar que DICE ha explorado otro escenario de guerra. La batalla que enfrentó a los británicos y al Imperio Otomano tuvo una gran relevancia en el conjunto de la Gran Guerra, pero suele pasar desapercibida en la novela histórica. Esto nos habla de la sensibilidad de los desarrolladores al plantear el conflicto desde varias perspectivas, y no solo mirar al corazón de Europa.

Volvamos por tanto a esa frontera entre África y Asia. Este mapa de temática desértica recuerda bastante al DLC Jakku de Star Wars Battlefront, al menos en su aspecto y las sensaciones que transmite. Pero al mismo tiempo está repleto de diferencias, como por ejemplo la multitud de puntos de interés que tiene y que hay ocupar en el modo Conquista a 64 jugadores. Hay dunas elevados y claros en los que te vuelves vulnerable, aldeas acribilladas con muros (que puedes destruir) ideales para la cobertura de la infantería, y afloramientos rocosos que le dan una verticalidad no esperada. Cuando todo eso se une la sensación de cohesión es total gracias al trabajo de diseño.

Aunque ese multitudinario modo Conquista es la flor y nada del título como de cualquier Battlefield, hay un modo Rush a 24 jugadores que se postula como gran alternativa. Los equipos se baten el cobre en torno a dos telégrafos que los defensores utilizan para solicitar fuego de mortero sobre sus enemigos. Los atacantes tienen que acabar con ellos de dos en dos para poder seguir avanzando.

Hemos jugado multitud de partidas durante estas dos semana para poder probar las cuatro clases de personajes y todos los vehículos disponibles (aunque no hemos dado con un biplano). Y tras muchas pruebas hemos llegado a la conclusión de que, al menos según la beta, la Primer Guerra Mundial es un tema que encaja perfectamente en la saga. Como no somos historiadores no podemos juzgar cuántas licencias se han tomado para conseguirlo, pero es muy probable que haya más de una para poder conseguir el equilibrio necesario. Y ole por ellos si ha sido así.

De las cuatro clases, la que más nos ha gustado ha sido la de Médico. Por su rifle electrizante, que es una gran alternativa para el combate a media distancia sin perder capacidad de respuesta para servir también en el combate más cercano. Visto lo fácil que resulta dar el soporte sanitario a los compañeros, va a ser un rol esencial en el equipo y vista la importancia del trabajo en equipo será relevante.

Es muy probable que la gente acuda al principio a la clase Explorador, sobre todo porque hay muchas sinergias con los títulos anteriores que hace que la aclimatación sea muy rápida, especialmente si se compara con Battlefield: Hardline. El Explorar, sin embargo, es el personaje típico de largo alcance para merodear por los laterales del escenario y la clase Apoyo tiene pinta de que también será positiva para completar un equipo que quiera trabajar organizado, aunque DICE podría hacer más por darle relevancia de cara a la versión final.

Si miramos más allá de las clases, y en Battlefield 1 es algo que se debe hacer, son los vehículos los que rompen la dinámica básica de la partida. Tanques con varias ametralladoras, jeeps con alguna muy débil, vehículos armados en los que te tapas más y todo ese arsenal aéreo que estamos deseando conocer. Y también las megaconstrucciones. Todo ello contribuye no solo al gameplay, también a la ambientación y a la credibilidad.

Pero lo que más nos sorprendió de todo fue el combate a caballo. Concretamente, lo fácil que es hacerse a él y lo bien que ha encajado en el conjunto. Puedes disparar mientras montas y si te tomas tu tiempo para apuntar puedes conseguir un buen porcentaje de acierto. Queremos probar mapas que estén más centrados en este tipo de combate y no solo probar qué tal se juega como aquí.

Bueno, esta sensación la podemos extender a todo el título tras jugar a la beta de Battlefield 1. Nos ha gustado lo que hemos jugado y queremos seguir haciéndolo para conocer los otros escenarios y también algunos modos de juego alternativos. Al principio de las impresiones decíamos que teníamos sensaciones enfrentadas sobre esta decisión de ir a la Primera Guerra Mundial, y ya hay una que está muy por encima de la otra. Es todo un acierto. Pero todavía está por ver que esto sea suficiente como para atraer a los aficionados a los shooters con todas las alternativas que llegan en los próximos meses. Lo comprobaremos a partir del 21 de octubre.