La voluntad de reducir el llamado "crunch" laboral en el sector de los videojuegos (obligar o presionar a los trabajadores para echar más horas de las contratadas), postura abrazada entre otras compañías por CD Projekt RED, ha saltado por los aires a las primeras de cambio. Porque el equipo no llega a la fecha de estreno de Cyberpunk 2077 y, para lograrlo, la compañía polaca ha instaurado la jornada laboral del seis días.
Un empleado de la compañía ha mostrado un correo interno firmado por Adam Badowski, jefe del estudio, en el que pide a la plantilla trabajar los cinco días habituales y también uno del fin de semana desde ya y hasta el lanzamiento del juego, en noviembre. Serán horas de trabajo remuneradas siguiendo el convenio polaco, pero el conflicto está en que no da posibilidad de elección a la plantilla.
Una vez más ha sido el periodista americano Jason Schreier el que ha sacado a flote este abuso empresarial en uno de sus artículos, esta vez para Bloomberg. "Sé que esto es diametralmente opuesto a lo que dijimos sobre el crunch. También va en contra de lo que yo vengo pensando en los últimos tiempos, que el crunch nunca debería ser la solución", se excusa Badowski, "pero hemos estirado todos los otros medios posibles de conducir la situación".
El responsable de la parte laboral de la compañía fue el encargado de reconocer las prácticas laborales abusivas que se han cometido en el pasado, especialmente en tiempos de The Witcher 3, y también el primero en decir que no confía en estas técnicas. Por eso, se prepara por adelantado para aceptar todas las críticas que le van a caer.
El trabajador anónimo de CD Projekt RED que ha hecho público el correo interno no ha especificado si va a demandar a la empresa.
[Actualzación]
Adam Badowski ha emitido un breve comunicado en el que corrobora la versión publicada por Schreier y justifica su decisión de forzar trabajo extra en la compañía por la importancia del proyecto y por la compensación monetaria. Se puede leer aquí.