Español
Gamereactor
avances
Code Vein

Code Vein - impresiones de la beta

Vampiros y rollo anime en el auténtico heredero de Dark Souls en la casa que lo publicó, Bandai Namco.

Suscríbete a nuestra newsletter

* Campo obligatorio
HQ
HQ

Un buen puñado de gente ha tenido la oportunidad de jugar ya a Code Vein, el action-RPG de nueva creación que un estudio especializado de Bandai Namco está sacando adelante con el aprendizaje de su alianza pasada con FromSoftware. Ha sido en una beta cerrada de fin de semana en la que hemos participado para entender mejor su multijugador y comprobar cuánto ha cambiado desde la última vez que lo catamos. Desde el principio, con los tráilers, no parecía un Dark Souls disfrazado de anime extravagante, y cuanto más lo jugamos más se refuerza esa idea.

Recopilamos para los nuevos lectores. Code Vein se desarrolla en un mundo postapocalíptico repleto de demonios sedientos de sangre, los Perdidos. Frente a ellos aparece el personaje del jugador, un joven con un don especial consanguíneo que le permite purificar las toxinas del ambiente y consumir sangre de otras criaturas para adquirir sus habilidades. De poco nos enteramos con esta versión y poco nos interesó, al menos no tanto como repartir leña.

Decir que es un heredero de Dark Souls no es exagerado en este caso porque es su realidad, nació con esa consigna. La estructura general es muy parecida, con un mapa abierto por el que ir avanzando de checkpoint en checkpoint, mientras te cargas a los enemigos para obtener objetos e ir evolucionando al personaje. Lo que sí ofrece, a diferencia de los de Miyazaki, es un sistema de personalización mucho más amplio.

Publicidad:
Code Vein

Las clases, llamadas códigos de sangre, surgen a partir de una combinación de estadísticas mejoradas, recursos pasivos y habilidades intercambiables. El luchador destacada en combate cuerpo a cuerpo y con la espada, mientras que el hechicero se puede teletransportar y acertar a enemigos desde lejos con proyectiles de fuego. Hay que probar y aprender a usarlo todo porque el juego te permite cambiar de clase y así consigue que el gameplay sea más fluido. También nos ha parecido que hay cierto equilibrio entre todo lo que te deja hacer y lo fácil que es manejarlo, siempre con la idea de progresar y aumentar el arsenal.

Donde más se parece en la forma de aproximar y entender los combates, ahí es cuando de verdad te sientes jugando a un 'anime-Souls'. El estilo visual apuesta por personajes muy estilizados, pero al mismo tiempo con tendencia a la belleza, con algunas excepciones ridículas como personajes absurdamente ligeros de ropa y otros inexpresivos que tampoco tienen mucho que decir. Contrasta con una banda sonora que nos entretenido en estas primeras horas con sus saltos de clásica a rock, al ritmo del combate.

Tras lograr superar todo el aprendizaje y las repeticiones del inicio, conseguimos llevar a una parte de Code Vein con más miga las Profundidades. Es una mazmorra especial que estará disponible para explorar en el modo historia, compuesta por caminos ramificados repletos de demonios necrófagos de mucho nivel que esperan en cada esquina. En esta parte empezamos a sufrir de verdad, forzándonos a avanzar de forma metódica, paso a paso, con cuidado de acabar con los enemigos que podíamos y llegar cuanto antes a los puntos de guardado para subir de nivel y desbloquear cualquier habilidad que nos sirviera para el siguiente enfrentamiento.

Publicidad:
Code Vein

Esta forma de menearte y ponerte contra las cuerdas para después mostrarte una escapatoria que podría no serlo es uno de los aspectos más divertidos de los Souls. Cada viaje al interior de la mazmorra éramos un poquito más fuertes y también más valientes, con la confianza que aporta haber consigo un poder y saber que puedes cargarte a todo lo que quepa en una sala. También se convierte en un ejercicio de memoria y no de habilidad pura con las manos. Qué caminos llevan a qué zonas, dónde están los enemigos exactamente colocados y cómo empezar cada duelo y qué estilo usar contra cada uno, todo eso cuenta.

Code Vein es un test terrorífico a la paciencia y a los reflejos. Quienes no consiguen avanzar reciben una ayuda a través del multijugador, pues puedes dejar entrar a otros jugadores para que te echen un mano, aprovechando la superioridad numérica y la riqueza táctica que aporta que cada uno sea de una clase. Aunque también está quien piensa que este sufrimiento es en sí el juego y cualquier tipo de ventaja estropea la experiencia. Se nota especialmente en las batallas contra los jefes, porque una victoria en grupo no es tan satisfactoria como conseguirlo por uno mismo.

Al fin y al cabo, solo hemos visto un pequeño fragmento acotado a unas pruebas de servidores. Nos vamos con ganas de que ajuste un poco el multijugador para que no se pase de muy difícil a muy fácil solo porque haya más gente. En solitario, Code Vein nos sigue pareciendo una muestra bien hecha de cómo tomar un estilo y darle vida por tu cuenta, combinando con maestría batallas tensas, movimientos rápidos y unas buenas dosis de exploración.

HQ
Code Vein

Contenido relacionado

0
Code VeinScore

Code Vein

ANÁLISIS. Autor: Juan A. Fonseca

Vampiros con aroma a "Souls" con muchas ganas de morder, pero sin llegar al hueso.



Cargando más contenido