El gran día de Bungie ha llegado y no ha dejado a nadie indiferente. Larga vida a Destiny 2, pues todos los planes pasan por matenerlo fresco durante tantos años como sea posible y renunciar a un Destiny 3 que deje a los guardianes actuales de lado. Para lograrlo, han trazado una hoja de ruta muy detallada que combina ampliaciones de contenido y vaciados de las zonas que vayan quedando desfasadas.
Bungie ha presentado tres expansiones, una para cada uno de los años venideros. Destiny 2: Beyond Light es el próximo capítulo del looter shooter y arrancará el 22 de septiembre de 2020. Le seguirán Destiny 2: The Witch Queen, en 2021 y Destiny 2: Eclipse (Lightfall) en 2022.
Mucho contenido, tanto que es inabarcable para el estudio, y por eso no todo va a estar disponible a la vez. Pero, en lugar de hacer un Destiny 3 con todo nuevo, el plan de los diseñadores es ir sacando partes del mapa que han quedado obsoletas para introducirlas más tarde en una especie de rotación. Todo ese territorio no va a desaparecer, sino que va a quedar almacenado en lo que han llamado Destiny Content Vault (DCV). En él también estará todo Destiny 1. Las primeras cinco zonas en pasar al banquillo serán Mars, Io, Titan, Mercury y Leviathan, pero garantizan que habrá forma de conseguir los exóticos de estas misiones.
Mientras tanto, el equipo se va a centrar en las temporadas en las que las armas y el equipamiento antiguo se va a quedar obsoleto, a la vez que en dejar alguna sorpresa más.. Porque la expansión actual aún no está acabada. Destiny 2: Shadowkeep arranca la undécima temporada, llamada Temporada de los visitantes (Season of the Arrivals). Se ha abierto la mazmorra de la Profecía, con retos y misiones de dificultad elevada y, además, los jugadores van a tener que recolectar mensajes de la oscuridad. Curiosamente, toca volver a mirar al cielo, porque si el domingo pasado caída el Omnipotente, ahora ha aparecido sobre Io una nueva nave en forma de pirámide.
Todos los detalles del contenido de la Temporada 11 están aquí. La oscuridad es el elemento de máxima relevancia en estos últimos meses antes de que empiece Destiny 2: Beyond Light.