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Análisis de Eliza

Desde que terminamos esta breve partida no nos quitamos Eliza de la cabeza. Una píldora que deja huella.

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Explorar los posibles futuros de la inteligencia artificial se ha convertido en un tema muy recurrente en los videojuegos, especialmente ahora que prácticamente ya podemos notar sus resultados. Desde todos los puntos de vista. Observation nos propuso ser nosotros la IA, mientras que System Shock nos enseñó a temerla. Pero Eliza, del estudio Zacktronics, no va de ciencia ficción ni de naves espaciales. Lo suyo es un historia cercana, en un mundo no muy distinto al que vemos por la ventana en 2019.

Despliega su narrativa en forma de novela gráfica, así que te pasas la mayor parte del tiempo escogiendo frases de diálogo y escuchando a los otros personajes. Sigues los pasos de Evelyn, una mujer que ha estado fuera del mundo tres años, mientras participaba en el desarrollo de Eliza. Su obra es un sistema de inteligencia artificial utilizado para dar terapia psicológica a quienes la necesitan. La única condición es que trabaja mediante un proxy, por ejemplo, un humano que expresa las palabras que este programa va redactando. Ahora la propia Evelyn ha decidido volver a fichar por Skandha, pero esta vez como uno de los proxies humanos.

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Desde el principio nos cuentan que esta mujer ha sufrido mucho en el pasado y se comporta de forma reservada y silenciosa. Poco a poco vamos conociendo a otros personajes, como Rae (que se encarga de las instalaciones) o Nora, una amiga que ha vuelto a su círculo tras un tiempo ausente y que viene muy bien para ponerse al día.

Es todo lo que podemos contar para que tenga sentido cuando lo juguéis. Sí debemos mencionar la importancia de todos estos personajes en la vida de Evelyn y cómo van marcando su camino en momentos determinados. La ponen a prueba, emocional e intelectualmente, y a pesar de ser una mujer callada, también es capaz de dejar huella a sus interlocutores. Todo, dependiendo de las respuestas y preguntas que nosotros vayamos escogiendo.

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Sus retratos y entornos pintados a mano con estilo realista tienen un toque apagado. Es esta historia contada a lo largo de seis capítulos la que tira constantemente de nosotros. Es un relato creíble y humano, que consigue llegar a los sentimientos del jugador a través de los dilemas que afronta cada personaje y ese pasado que acecha. Por eso era tan importante que la selección de voz y la actuación en V.O. fuera acertada, y afortunadamente lo han clavado.

Además de por cómo está escrito el texto y sus pormenores, también nos ha gustado por la gran cuestión que plantea. ¿Es posible que una IA sea capaz de ofrecer terapia? Puede que tengáis una respuesta clara en vuestra cabeza al leer estas líneas, pero el juego consigue abrir un debate sobre si una inteligencia artificial puede llegar a entender o comprender las emociones humanas y, a partir de ahí, ofrecer una solución. Un conflicto inseparable de otro que genera, y es el de la ética en torno a los datos personales que maneja para ser funcional.

Un tema muy importante que, afortunadamente, se ha tratado desde el conocimiento y el respecto a un campo tan importante como es la salud mental. Eliza abre un melón utilizando métodos propios del enfoque cognitivo conductual que puedes encontrar en cualquier consulta, así que tampoco hay que viajar tanto al campo de la fantasía para buscarle sentido. Tener que ceñirse a un guión cuando estás escuchando los problemas de los usuarios sencillamente porque te han encargado confiar en los resultados del sistema, y no en tus propias habilidades, es un reto.

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Al escuchar todas estas historias, de los usuarios y de los demás personajes, te vas sintiendo apelado por el juego. Es muy típico decir que es una experiencia humana, pero es que es así. Nos recuerda a Night in the Woods por la forma en la que logran transmitir los pequeños detalles de la vida humana. Es muy probable que en algunos casos te sientas identificado y esos instantes son muy potentes.

No todo es el tiempo es hablar y charlar. Para salir de ese bucle, Zachtronics ha recurrido a la tecnología y al día a día de esta doctora en Seattle. Hay que responder emails y echar un vistazo al móvil de vez en cuando, y de esta forma se va construyendo la otra parte de la trama, que es el pasado de Evelyn, junto a los orígenes de Eliza.

Son solo unas cuantas horas de partida pero son suficientes como para que te quedes pensando un buen rato y con una gran sensación de satisfacción. Un videojuego narrativo que logra capturar las ideas y las emociones humanas, pero de siempre tratando de provocar una reacción, presente o futura. No es una montaña rusa de sensaciones como en otros juegos parecidos, aquí lo que nos gusta es cómo transmite las esencias y cómo lo hace en torno a un tema político y moral que no escapa a nuestro futuro cercano. Si te gustan las buenas historias y quieres echar una tarde de verano, es una apuesta muy recomendable.

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09 Gamereactor España
9 / 10
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Sus personajes, su historia repleta de emociones, un tema que tarde o temprano tendremos que debatir, un guión abierto bien planteado.
-
El final se alarga un poco.
overall score
Media Gamereactor. ¿Qué nota le pones tú? La nota de la network es la media de las reviews de varios países

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