Guitar Hero Live - primeras impresiones

No es tarea fácil dotar de un poco de innovación a un sistema de juego muy simple que se autodestruyó quemándose por abuso hace cinco años. Sin embargo, Activision lo está intentando.

¿Quién no ha 'rockeado' en su vida con una escoba o una raqueta de bádminton en frente del espejo? Seguro que todos, en algún momento de vuestras vidas, habéis hecho un poco de 'air guitar' para seguir el ritmo de la canción, y Guitar Hero fue el mejor videojuego para convertir esa clase de momentos en una diversión tangible e interactiva. La idea era sencilla: enfundarse la guitarra de plástico como un mando y, con un poco de sentido del ritmo, ir procesando los 'quick time events' o pulsaciones de botones siguiendo algún temazo muy popular. La fórmula triunfó y el juego se convirtió en un nuevo referente de los 'party games'.

No obstante, eso fue hace cinco años. Por culpa de los lanzamientos demasiado frecuentes, las ediciones especiales y las toneladas de contenidos descargables, el género acabó por autodestruirse. ¿Por qué iban los fans a comprarse un juego nuevo y/o más instrumentos de plástico cuando lo único que quieren son nuevas canciones? Pero poco a poco parece que ha llegado el momento de revivir este género que puede llegar a ser un pelín absurdo visto desde fuera y, por eso, Activision regresa a los escenarios con una respuesta diferente en Guitar Hero: Live.

Y es cierto que no es tarea fácil aportar un poco de innovación a un sistema de juego tan simple, más que nada porque el mercado de los videojuegos se ha desarrollado rápidamente en los últimos cinco años. ¿Cómo refrescar el sistema sin complicar la base sencilla? ¿Hacia dónde ir con el estilo visual? Los desarrolladores sabían que si añadían únicamente unos gráficos rompedores, no conseguirían ganar puntos entre los fans, así que, con Guitar Hero: Live, han optado por una estrategia de mejora mucho más divertida y ridícula. Adiós a aquellos días en los que todos jugábamos con un único avatar que nos representaba a todos. Ahora, Guitar Hero: Live se juega en primera persona... acompañado de un vídeo con imágenes reales.

Aunque es cierto que no se puede tocar con Metallica en el escenario, al menos sí habrá músicos reales que tocarán las canciones con vosotros, bueno, vuestro propio 'cover', para ser precisos. Con esto se pretende crear una atmósfera real de estar tocando en directo, porque incluso los sonidos han sido adaptados a cada lugar concreto, desde pubs pequeños hasta conciertos enormes a cielo abierto. Antes de la canción, jugueteamos nerviosamente con la púa, la banda se junta una última vez en un momento de comunión y se compromete a hacer bien la actuación. Entonces, pasamos por el 'backstage' hasta llegar al escenario, pasando por torres gigantes de amplificadores y sistemas de iluminación fantásticos, hasta que llegamos a nuestra posición en frente de la ruidosa multitud. De hecho, han conseguido transmitir muy bien el efecto con esa gente de verdad: se puede llegar a sentir miedo escénico.

Entonces comienza la canción y tendréis que tocar correctamente tantas notas como sea posible para que el humor del público se mantenga bien alto. Los fans en primera fila piden a gritos su buena ración de rock y se saben las canciones de memoria, claro, no como yo. Yo no soy guitarrista y, de hecho, solo jugué al Guitar Hero original unas cuantas veces y siempre después de otras cuantas cervezas. Bueno, da igual, no es difícil de entender, como decíamos.

La nueva guitarra está muy chula, aunque quizás sigue siendo un poco pequeña, pero tiene unos tonos muy guapos de marrón y negro y los coloridos botones ahora se han convertido en seis botones integrados de forma más sutil en dos filas dentro del cuello de la guitarra. Es sin duda una mejor imitación 'arcade' de la realidad.

Así que me esfuerzo por seguir las rápidas instrucciones que se muestran en pantalla, con poco éxito. De hecho, la multitud que está enfrente del escenario está a punto de lanzarme tomates en lugar de sujetadores, y el teclista de mi grupo se dedica a sacudir la cabeza incomprensiblemente. Sin embargo, también es difícil concentrarse, porque los miembros del grupo con los que estoy en el escenario pueden ser buenos músicos, pero, desde luego, no son buenos actores.

En anteriores Guitar Hero, si la cagabas se activaba el sonido de "buuuu", mientras que si lo hacías bien la cámara pasaba a un plano del público botando. Sabemos que es más complicado adaptar un juego a vídeos estáticos de verdad, y que, históricamente, las grabaciones con imágenes reales en los videojuegos siempre han tenido un elemento de ridículo o, por lo menos, de comedia (Wing Commander envía saludos). Además, las secuencias tienden a hacerse algo cansinas. Así, si os pasáis mucho tiempo con el juego, la forma planeada de entrar al escenario y las diferentes reacciones acaban produciendo bostezos. Veremos.

Ahora bien, si os juntáis con unos amigos delante de la televisión, la experiencia cambia por completo, porque, de por sí, la diferencia de habilidad en el juego ya puede ser algo muy entretenido. Ya sea riéndoos con los fallos de un colega o aburriéndoos con las dotes de virtuoso del dueño del juego, hay mucho más que ver que un cuello de guitarra infinito.

Por otro lado, los desarrolladores quieren potenciar la diversión integrando el sistema Guitar Hero TV, o GHTV. Aquí, ya no hay grabaciones de conciertos, sino que se pueden ver los videoclips oficiales de las canciones que toquéis. Lo cierto es que está muy bien porque están todos, pero lo verdaderamente divertido reside en los diferentes canales: en ellos las canciones suenan simultáneamente para todos los jugadores online y podréis jugar casi en directo contra el resto del mundo. Además, podréis ver la clasificación a la izquierda de la pantalla para saber cómo vais.

La verdad es que nunca he sido un fan acérrimo del género de videojuegos musicales, porque personalmente creo que no son videojuegos del todo y, en caso de duda, escogería tocar una guitarra de verdad. Sin embargo, me fue imposible aguantarme, porque muchos compañeros no paraban de hablar de ponerse a rockear con Guitar Hero: Live. Está claro que utilizar vídeos con imágenes reales es una estrategia valiente por parte de los desarrolladores, además de que Guitar Hero: Live puede así salir para prácticamente cualquier plataforma capaz de reproducir vídeos.

Creemos que compartir escenario con los grupos reales hubiese sido algo verdaderamente impresionante y molón, pero seguramente sea algo bastante complicado de conseguir. Por otro lado, Activision aún no ha mostrado la lista definitiva de canciones, aunque ha asegurado que se añadirá contenido nuevo regularmente. No obstante, no sé qué tal sonará este nuevo/viejo sistema cuando Guitar Hero: Live se ponga en manos de los fans a finales de 2015.