Análisis de Harvest Moon: Un Mundo Único (Nintendo Switch)

Este año es, sin duda, el año de los aniversarios de muchos juegos. Por ejemplo, Zelda celebra sus 35 años en pantalla, Sonic cumple 30 años y Pokémon conmemora su 25º aniversario. Pues bien, otro aniversario, que quizás haya quedado un poco eclipsado por estos gigantes, es el de Harvest Moon. Este simulador de granja debutó en SNES en 1996, y todavía podemos apreciar la influencia que ha tenido en el mundo de los juegos en títulos como, por ejemplo, Stardew Walley y Animal Crossing, los cuales han seguido su ejemplo. Coincidiendo con su 25º aniversario, Natsume ha lanzado un nuevo título, Harvest Moon: Un Mundo Único (One World en inglés). Esta nueva entrega pretende revitalizar la serie y, para ello, apuesta por la exploración, pero ¿logrará esta nueva entrega desviar a Harvest Moon del sendero de broza y rastrojo que ha seguido durante los últimos años?

Bueno, al comenzar, justo después de crear tu personaje, te encuentras en un mundo bastante deprimente en el que las patatas son la única fuente de alimento, y donde el resto de verduras solo existen en los libros. Vamos, que ahora tu aldea no es más que una sombra de lo que un día fue, ya que hace mucho tiempo una misteriosa deidad, conocida como la Diosa de la Cosecha, la bendijo y las tierras estaban repletas de deliciosas verduras. No obstante, ahora la Diosa de la Cosecha ya no está, y la situación es devastadora. Dentro de esta historia, tu misión será la de revivir a la Diosa de la Cosecha e intentar que el mundo vuelva a ser lo que era antes de que la gente perdiera el respeto por la naturaleza.

La dinámica de partida de Un Mundo Único se basa en dos factores fundamentales. En primer lugar, el factor social: interactuar con los aldeanos y completar las tareas que te mandan. En segundo lugar, el factor agrícola: expandir y cuidar tus tierras de cultivo. Conforme vayas avanzando en la historia, verás que estos dos factores se irán entrelazado, ya que deberás producir ciertos productos para poder ayudar a los aldeanos con los diferentes problemas que vayan surgiendo. Además, una cosa que me gustó bastante de este título es que puedes completar la historia a tu ritmo, y tienes total libertad para cultivar, ampliar tus tierras de labranza e incluso para completar las tareas cuando te dé la gana.

Asimismo, otro aspecto que también me gustó mucho desde el principio fue lo fácil que es cultivar. Ahora, únicamente tienes que seleccionar la zona del terreno en la que desees trabajar y pulsar el botón A (en Switch), y automáticamente el juego realizará la acción que se necesite en ese momento, ya sea plantar una semilla, regar los cultivos o añadir fertilizante. Lo mismo ocurre cuando estás picando en la mina o cuando quieres talar un árbol, esta vez no tienes que rebuscar en los menús para elegir la herramienta que necesitas, sino que aparece automáticamente.

Bueno, como ya habréis podido intuir, Un Mundo Único nos ofrece un enfoque diferente de la agricultura. En esta nueva entrega, si queremos obtener semillas tendremos que explorar el mundo. Es decir, ya no las podremos comprar en otra granja, sino que las ganaremos interactuando con los Duendes de la Cosecha, repartidos por todo el mapa. Estos duendes siempre están en el mismo lugar y te dan una semilla por día, lo que a mí, personalmente, no me termina de convencer. A ver, es cierto que de esta manera el gameplay se anima un poco, pero eché de menos la comodidad de poder comprar semillas yendo a un único lugar. Asimismo, muchas de las rutas del juego son sosas y aburridas, lo que hizo que no me apeteciese volver a recorrerlas.

Otro aspecto interesante de la agricultura es que los cultivos mutan en función de la estación del año y del entorno en el que se plantan. En el mapa, hay cinco regiones diferentes, y todas ellas cuentan con su propio su clima, fauna, flora e incluso sus propios vecinos. Además, en cualquier momento podemos trasladar nuestra granja a cualquiera de estas regiones, ya que es una granja portátil. Volviendo a lo de las mutaciones, por ejemplo, una sandía que crezca en la arena de la playa será de color amarillo, y una baya blanca que crezca en un terreno nevado se convertirá en una baya mágica. En fin, esto me moló bastante ya que me hacía plantearme dónde me convenía más plantar ciertos cultivos, y fue divertido experimentar y ver qué resultados podía obtener.

Sin embargo, lo que creo que fastidió la experiencia fue un puñado de malas decisiones en lo que respecta al diseño. Al parecer, no hay ninguna opción que te permita descartar objetos y ni siquiera puedes cambiar los objetos de tu inventario por los que están en el suelo. Además, al caminar tu resistencia se agota al mismo ritmo que cuando talas un árbol para después cosechar en ese terreno. Creo que todos estamos de acuerdo en que tiene sentido que tu resistencia se agote cuando llevas haciendo cosas bastante rato, pero lo que no tiene sentido es que lo haga tan rápido y sin apenas haber hecho ningún esfuerzo, como pasa en este juego, donde los viajes más largos entre diferentes zonas me parecían casi imposibles, a menos que llenase mi inventario de suministros.

En cuanto al acabado visual, podemos decir que no está muy refinado y su calidad es la de otras producciones de calibre inferior. Muchas de las regiones en las que entras dan la sensación de estar completamente despobladas (incluso algunas casas están totalmente vacías), y no hay nada que distinga las rutas que conectan unas y otras, aparte de un simple cambio de tonalidades. Por otro lado, las secuencias de diálogo también son un poco confusas, ya que el cuerpo de tu personaje a menudo aparece en el fondo atrapado dentro de una animación en marcha o mirando en dirección contraria.

Puede que algunas de las ideas que se han incorporado en Un Mundo Único sean buenas, pero la ejecución es pésima y le falta mucho pulido. En resumen, no está a la altura de otros títulos que hemos visto de esta serie. Eso sí, me ha gustado lo sencillo que es cultivar y el esfuerzo que ha hecho el estudio por incorporar la exploración como elemento base del gameplay, aunque tenga sus defectos. Sin embargo, algunas decisiones en cuanto al diseño me parecieron bastante cuestionables y su acabado gráfico podría haberse mejorado mucho. En fin, esperemos que los desarrolladores puedan aprovechar algunas de las ideas que han incorporado en este juego de manera experimental y las refinen para futuros lanzamientos. Que las cultiven para que cosechemos juegos mejores.