Análisis de La Colección de Nioh

Los juegos de Nioh del Team Ninja fuerzan interpretaciones exageradas de personajes reales y mitológicos en una historia de fantasía ambientada, de lejos, en el periodo Sengoku de la historia de Japón. Es un cuentacuentos sobre personas corrompidas que aspiran a tomar el poder de los Yokai con la ayuda de esa fuente de energía demoníaca llamada Amrita, solo para acabar siendo dominados por ella. Los motivos y su implicación desaparecen pronto de la escena, pero compensa con esa producción imnotizante y su estilo de contar las cosas.

En Nioh, ese gemeplay ya trillado que consiste en mezclar ataques ligeros y fuertes se explaya con la introducción de las tres posturas de combate, que obligan al jugador a escoger entre fuerza y movilidad a cada rato. además, la barra de energía que limita los movimientos consecutivos, ha ganado interacción con la recompensa del buen ritmo de ejecución. Combos, conjuros y artilugios ninja abren oportunidades muy marcadas que deben ser leídas con precisión y astucia. Y cuando el espíritu guardián se libera, la ventaja en combate es aún mayor. El estudio sorprendió con este sistema complejo pero bien armado hace años y lo llevó un poco más allá con Nioh 2 al sumarle la barra de maná, asociada a las habilidades especiales yokai.

Koie Tecmo ha querido despedir la serie, que pasa a un periodo de descanso, relanzando todo lo que ha dado de sí de nuevo en PS4 y también como versión mejorada en PC y PS5. A la consola de nueva generación ha llegado el pack completo, La Colección de Nioh, que no consiste en la versión retrocompatible jugable desde noviembre sino en la versión remasterizada de cada una de las entregas. Presenta dos cambios que hablan por sí solos: los tiempos de carga, porque entre tener que esperar 20 o 30 segundos a reaparecer tras cada muerte (y son muchas) a hacerlo de forma instantánea te cambia la vida. Ya no te da casi ni tiempo a maldecir a ese enemigo de turno, porque enseguida estás de nuevo en acción.

La segunda diferencia es el modo a 120 fotogramas por segundo. Esa tasa enorme de frame-rate llega a costa de una reducción de la calidad visual gorda, claro. En el viejo Nioh 1 es muy convincente, pero no tan potente como jugarlo en modo Quality. Dada la mayor calidad técnica de Nioh 2, los sacrificios que hay que asumir en este otro son mayores (especialmente el nivel de detalle de las sombras). Además, no han conseguido que sean 120 fps constantes y fiables, así que al final es casi mejor optar por alguno de los otros dos modos visuales que ofrece la colección en PS5 y PC (y en PS4 Pro), que son 4K y Rendimiento. Yo me quedo con los de calidad gráfica.

La dificultad es un factor a tener muy en cuenta, como buen juego heredero del estilo Souls. Tienen mucha fama de inaccesible, pero si venden tan bien es porque poco a poco se puede ir sacando. Desde mi punto de vista, Nioh es uno de los más duros del subgénero por la velocidad de las acciones y el poco margen de error que deja, porque el Team Ninja castiga mucho cada fallo cometido. Y no solo estamos hablando del combate mismo, también afecta al diseño de niveles y a la colocación de los obstáculos.

Además de estas optimizaciones, The Nioh Collection hay que valorarlo por todo lo que lleva en su interior. La primera parte son unas 50 horas de juego y la segunda es aún más grande. El Team Ninja creó tres buenos y largos DLC para cada uno, el último apenas recién estrenado. Son entre 5 y 10 horas más por pack, así que haz cuentas, aunque al hablar de juegos así todo depende de la habilidad, pues los speedruns son muchísimo más cortos y hay quien se atasca horas y horas. La cuestión es que es un recopilatorio con muchísimo contenido, pero también es bien cierto que cuesta unos 80 euros.

Menos para quienes lo tengan ya comprado, porque las actualizaciones son gratis. Quien tenga una partida empezada en PS4 puede transferir su archivo de guardado a PS5, pero para ello hay que activar en Menú de ajustes > Sistema la opción de cross-save. Hay que hacerlo tanto en una entrega como en la otra para que se guarden en la base de datos cloud de Koei Tecmo. Completado este paso, hay que encender la PS5 y descargarlo para que lo reconozca. Además de tener tu progreso, recupera también los trofeos ganados previamente. Sin embargo, he encontrado un fallo y es que el sistema siempre trataba de instalar la versión antigua en la consola nueva, aunque es algo que ya no debe pasar desde la última actualización de firmware.

Otro beneficio más en tus manos, literalmente, es el uso de la vibración háptica del DualSense. Pero tras muchas horas de juego no se puede decir que aporte nada del otro mundo a estos juegos en concreto. El mando vibra generosamente al arrasar con objetos destructibles y los gatillos se endurecen para simular la tensión de los lanzamientos con armas a distancia. También saca partido a las tarjetas de actividad en estas versiones optimizadas, pero como falta información relevante de las misiones, son poco útiles. Si acaso lo mejor es poder ir a misiones concretas.

También han aparecido algunos bugs de sonido y de imagen, pero ninguno pasa de lo anecdótico ni mancha lo bien que funciona La Colección de Nioh en PlayStation 5.

Dos muy buenos juegos de acción y todas sus expansiones agrupados en un mismo pack y con mejoras. Es una buena alternativa para quienes siempre lo han tenido en mente por lo "menos estresante" que es morir y volver a empezar al instante, sin tener que esperar. Es bien cierto que son complicados y la dificultad es endiablada en la parte final, pero es un reto que mucha gente está dispuesta a asumir. Me alegro de que el Team Ninja se vaya a dedicar a otra cosa y ojalá que encuentra la inspiración como lo ha hecho para darnos esta serie, que se despide de la mejor manera.