Hace relativamente poco que enterraron el hacha de guerra en lo que se ha venido a llamar la guerra de las consolas. Nintendo, Sony y Microsoft decidieron dejar de fomentar el lenguaje de enfrentamiento y de hacer declaraciones públicas los unos contra los otros tras varios meses de disputa creciente a raíz de la implementación del cross-play y de las exclusivas third party. El objetivo, dar ejemplo de que esto es un hobby de todos y no alimentar la toxicidad en el online y las redes sociales.
Pero esta guerra viene de mucho más atrás, y solo uno de los implicados la empezó. A principios de los 90, Nintendo y Mario ya dominaban el sector. Fue entonces cuando apareció con fuerza Sega y trajo Sonic the Hedgehog. En aquellos tiempos, se consentía y se fomentaba otro tipo de publicidad, como citar a la competencia de forma negativa en tus propios anuncios. Llegó tanto a la gente que cada marca pasó de tener fans a tener prácticamente soldados.
El origine de esta guerra de las consolas ha sido recuperado en un documental titulado Console Wars que produce y emite CBS All Access. En él aparecerán personas implicadas en la primera línea, como los productores ejecutivos Seth Rogen y Evan Goldberg. Está basado en el libro de 2014 titulado Console Wars: Sega, Nintendo, and the Battle That Defined a Generation, de Blake J. Harris.
El contenido se centra en lo que sucedió en los Estados Unidos, pero los jugadores más veteranos de Europa y el resto del mundo también recordarán las charlas y discusiones entre sus amigos proclamando la superioridad de Super Nintendo sobre Megadrive y viceversa. Y también, las tardes compartidas en casas de unos y otros para probarlo todo, pues al final lo importante era jugar.