Microsoft ha reconocido ante el micrófono de Kotaku los graves problemas que afectan a la versión para Xbox One de Halo: Reach y ha asegurado que ya está trabajando para solucionarlo.
A principios del mes de diciembre, Microsoft comenzó la distribución del juego de Bungie de 2010, pero este vez para Xbox One como parte del catálogo que se está haciendo retrocompatible. Sin embargo, desde el primer momento numerosos usuarios que lo han descargado han denunciado que no funciona, que la adaptación es tan mala que es injugable. Sobre todo porque sufre un problema de caída de la tasa de refresco y ralentizaciones.
"El equipo de programadores de Xbox está viendo el problema en estos momentos y estamos trabajando para solucionarlo", dice el escueto mensaje transmitido desde Estados Unidos. Con lo que ha costado volver a tener los viejos títulos en la máquina nueva.