Sakurai no hará más Smash Bros

El nipón Masahiro Sakurai (44) se ha convertido en los últimos años en un completo obseso del contenido y del detalle, en el mejor de los sentidos para los jugadores, como bien empezaron a probar Super Smash Bros. Brawl y Kid Icarus: Uprising, pero sobre todo como ha demostrado Super Smash Bros. for Wii U. Tamaña es la empresa de cada proyecto en la serie de lucha que la entrega recién llegada a las tiendas bien podría ser la última firmada por el 'padre' de Kirby.

En declaraciones a la revista Game Informer, el nipón reconoce que la serie podría recibir más entregas en el futuro, pero no cree que sea con él al frente:

"No puedo asegurar que no habrá otro juego de Smash Bros. Tanto con Melee como con Brawl hice los juegos con el pensamiento de que no tendrían más continuaciones. Por lo tanto, no me corresponde ignorar la posibilidad de otra entrega. Sin embargo, en lo que a mí respecta, no creo que vuelva a ocurrir".

Hay que recordar que, tras el enorme esfuerzo que supuso para el director el proyecto Super Smash Bros. Brawl (llegó a cambiar su forma de vida para invertir más horas y quiso encargarse personalmente de la actualización diaria del portal Smash Bros. Dojo), el nipón ya llegó a decir que no volvería a meterse en otro Smash. La relación de Sakurai con la franquicia ha sido extraña, pero su implicación ha consistido en pasión y sacrificio para agradar y sorprender a los jugadores desde la segunda entrega. El juego que comenzó como una tímida propuesta en Nintendo 64 se convirtió en un éxito mundial en Gamecube, pero Nintendo ni le avisó cuando presentó Brawl por sorpresa para Wii (el presidente Iwata quiso verle en persona y convencerle para la dirección del proyecto tras el anuncio), mientras que el juego que acaba de llegar a 3DS y Wii U se ha realizado con un equipo de Bandai Namco.

Es una cuestión de haberse 'pasado tres pueblos', de no concebir un juego aún más grande, completo y repleto de guiños. Así entiende Sakurai la que han 'liado' con la abrumadora escala y tamaño del juego hasta la fecha, y cómo una quinta parte tendría que superar lo insuperable:

"Nuestra intención con Super Smash Bros. for Wii U era aportarle méritos adicionales al juego, que llegara mucho más allá del precio de venta al público. En términos de escala, y en cuanto al enorme número de personajes, sobrepasamos nuestros límites hace tiempo. Y aun así, si recortáramos el número de personajes o modos de juego en una entrega futura, estoy seguro de que habría quejas".

Y por mucho que le guste y que disfrute con cada proyecto Smash, esa descomunal cantidad de contenido hace tiempo que supera lo que Sakurai puede asumir y controlar, por lo que seguir con la serie supondría aún más esfuerzo personal, llegando a ahogar completamente sus posibilidades mentales y físicas. Otro tendría que hacerlo, pero el nipón tira entonces de orgullo:

"Podríamos decir que todo el esfuerzo en el pasado para extenderlo aún más, seguir exprimiéndome y aportando todos esos méritos adicionales, terminaría apretando aún más la soga alrededor de mi cuello en el futuro. Puede que esto contradiga mi deseo personal de seguir dando a los jugadores todo lo que puedo, pero no encuentro una respuesta fácil. Y aun así, pese a esto que acabo de decir, también me cuesta imaginar a otra persona ocupando mi lugar y ofreciendo todo este contenido de valor añadido sin mí".

La eterna contradicción de Sakurai y otros apasionados creadores de videojuegos: cómo superarse y seguir ofreciendo lo mejor a los usuarios sin sacrificar la propuesta de una obra... ni la vida de uno mismo.