Análisis de Tetris Effect

Tetris no necesita presentación. Queda poca gente por conocer esta vieja obra de Alexey Pajitnov, creada en 1984, que un par de años más tarde explotó en Game Boy para convertirse en uno de los mejores juegos de puzles de la historia, pasada y presente. La perfección en el concepto y la adicción de su mecánica han dado lugar a varios estudios universitarios. Puede que vosotros tengáis otro que os guste más, pero nadie ha logrado arrebatarle el trono.

Lo hemos jugado de muchas formas y en muchas plataformas. Desde la pantalla verde de entonces a los experimentos modernos como el reciente Puyo Puyo Tetris, pasando por plagios que han probado con las tres dimensiones o con piezas de otras formas. Olvidaos de todos, porque aquí llega una de las experiencias definitivas a partir del concepto original, Tetris Effect de Tetsuya Mizuguchi y compañía.

La esencia es la misma, es un juego bastante puro. Coger tetriminos que caen en vertical, moverlos y colocarlos para hacer líneas. Da la opción de detener la acción brevemente en medio de la partida de vez en cuando para ganar perspectiva y cuenta con pieza de guardado (reserva) y con sombras. Quienes lo dominan no van a tener ningún problema en adaptarse a sus condiciones. Porque, en vez de intentar retorcer una fórmula y un gameplay que ya han sido perfeccionados, Enhance Games ha optado por invertir en la forma.

El modo principal, Journey, tiene un toque aventurero, porque conecta varias fases. Una línea de cuatro experiencias de temática personalizada que se encadenan para crear capítulos. Conforma una campaña en la que los jugadores se van a poder enrolar tantas veces como quieran en solitario, pensando siempre en batir récords de puntuación y las calificaciones que otorgan. Siempre ha habido y siempre habrá un límite al que enfrentarse, personal o en los rankings online.

Nada innovador. Lo que hace que Effect sea tan especial es la experiencia audiovisual que surge a cada paso que se da. Cada localización trae su propia música, formada por unas piezas que responden de forma contextual a tus acciones. Así que, mientras estás jugando al Tetris de siempre, te envuelve y seduce una nueva capa sonora magistral que, además, retroalimenta tus movimientos y tus logros.

Hay algunas composiciones preciosas, y el uso de algunas voces melódicas acompañando a beats electrónicos te engancha para que no logres escapar de ahí tanto tiempo como sea posible. Una vivencia musical que se acentúa aún más gracias a unos efectos visuales fabulosos, que componen un marco para este juego nunca visto. Tetris Effect nos lleva a océanos profundos, nos lanza por encima de las nubes e incluso nos invita a conocer rasgos culturales gracias a unas animaciones que rondan por detrás de la caja de juego. Cada área llega con sus efectos visuales propios, y también con una variante del diseño y la textura de los propios tetriminos, respetando siempre la forma y su uso.

Es un espectáculo de luces y colores constante, un festín para los sentidos. Sí, también es una distracción para dar el máximo en competitivo.

Jugando en la tele (recomendamos auriculares o sonido envolvente), te absorbe para que te olvides del resto de distracciones que hay en el mundo real. Con un headset PlayStation VR, te absorbe por completo, a un nivel pocas veces visto. La sensación de inmersión en total y muy positiva, haciendo olvidar que hay algo más ahí fuera como pocos juegos de Realidad Virtual logran. Teníamos miedo de que todas esas partículas flotantes distrajeran aún más en este modo, pero es justo lo contrario, tenerlas presentes en 3D lleva la experiencia un nivel más allá.

Cuando estás jugando con PSVR, los entornos de los que hablábamos se posicionan en torno a ti para hacerte sentir que estás flotando en un bosque lluvioso, nadando entre ballenas o vagando por el desierto; mientras juegas al Tetris. Despierta todos los sentidos al construir ese escenario en el que interactúas alterando la potencia y composición de la música y la velocidad de movimiento de las animaciones con cada una de tus jugadas. Sientes que tu cerebro y tus músculos se van relajando y caminan hacia el nirvana si estás frente a una serie relajante, o que tu corazón se acelera y los nervios te acorralan cuando llegan los retos de las últimas pantallas.

Dicho lo cual, terminar el modo aventura no es haber acabado, porque más allá hay un montón de modos de juego propios de estos últimos años junto a los originales de Tetris Effect. Los hay que inciden más en el propio puzle, en la colocación de piezas, y otros que piden más imaginación y reflejos para salir adelante. Dependiendo del estado de ánimo y los nervios que tengas en ese momento, encontrarás una cosa u otra más de tu gusto.

Hay modos y también retos en los que poner a prueba la habilidad, porque el pique contra otros o contra uno mismo no se ha perdido. Los eventos y rankings online siguen presentes. Lo que más nos ha gustado de todo lo probado es el nuevo modo Misterio, que mezcla mecánicas y va alternando entre distintos efectos para obligarte a cambiar tu forma de actuar constantemente, a medida que aumenta la velocidad de caída de las piezas. Invertido en espejo, de arriba a abajo, fichas incompletas, bloques gigantes, tropezones en medio de tu figura... puede pasar cualquier cosa.

Con todos esos modos y tres niveles de dificultad entre los que escoger, hay mucho con lo que estar entretenido con el paso del tiempo, aunque sabemos que en este juego si te da por un modo lo vas a machacar hasta el final. Es una experiencia tan completa que está entre los mejores Tetris jamás creados. Pero le falta algo, y es bastante raro: no hay multijugador. Ni local, ni online, no hay forma de enfrentarse cara a cara a otra u otras personas. Entendemos que perdería la gracia audiovisual a pantalla partida, pero no sería tan complicada de adaptar en línea. Para mucha gente, las partidas han sido siempre en soledad, pero ya hace bastantes años que se reforzó su aspecto competitivo directo, más allá de las puntuaciones. Unido a la distracción de algunos efectos, son las dos únicas pegas que hemos encontrado.

Sea como sea, con o sin PSVR, merece una prueba y lo tenéis al alcance de la mano con la demo gratis que hay en PS4. Es una experiencia sensorial fantástica que respeta la jugabilidad de siempre, y que aumenta a niveles de placer cuando se vive en 3D y Realidad Virtual. ¿Es el mejor de la historia? Lo hemos discutido en la redacción y hay quien piensa que no ha superado a Tetris DS, pero Tetris Effect ya tiene sus defensores. La creatividad de Tetsuya Mizuguchi y los suyos era lo que los viejos tetriminos necesitaban para dejar huella también en estos tiempos modernos.