Thrustmaster T-GT - Análisis del volante

Thrustmaster T-GT es un volante para simracing lanzado oficialmente como el volante de Gran Turismo con licencia, lo cual es su principal atractivo, y es que este volante ha sido calibrado y optimizado para un título principalmente, el exitoso Gran Turismo Sport. Obviamente, también funciona a la hora de jugar a otros juegos como Assetto Corsa o Project CARS 2, pero no hay duda de que el último volante de Thrustmaster saca su máximo rendimiento con el juego para el que se diseñó.

Tenemos que avisar de antemano que el volante con los pedales cuesta unos 700 €, una premisa complicada para muchos jugadores, más cuando está optimizado especialmente para un solo juego. Pero si nos preguntarais a nosotros, os diríamos que con estos dos accesorios se consigue la experiencia que todo fan de los juegos de conducción desea, ya que estos productos funcionan increíblemente bien juntos. Diríamos, de hecho, que merece la pena pagarlo para poder disfrutar de la mejor experiencia de GT Sport que se puede comprar, incluso aunque el precio pueda parecer excesivo.

Aunque el Fanatec CSL Elite Racing Wheel para PS4 es mejor volante que el T-GT y tiene una base claramente superior a la de Thrustmaster, aún no consigue la misma eficiencia con el último título de Polyphony Digital (habrá que ver ahora que tiene soporte nativo) y aunque sí que queremos criticar el precio, es difícil hacerlo después de haber disfrutado de estos dos productos durante todo un mes. Muy difícil.

T-GT está creado a partir del Thrustmaster T300 RS (un volante que disfrutamos hace un par de años y al que le dimos una puntuación de 8/10), con algunas diferencias notables. Para empezar, el motor brushless es más potente y esto se puede ver claramente en cuanto entras en la pista de GT Sport. Este volante es capaz de ofrecer un Force Feedback mucho más realista, y esto combina a las mil maravillas con la conducción en Gran Turismo Sport, que es suave como la seda.

También hay que destacar que es un volante de correa y no de transmisión directa "direct drive" como se rumoreaba antes de su lanzamiento. Salvo la parte central del volante que resulta de inferior calidad, el resto está muy bien terminado y le da un toque lujoso. Esto se debe en parte a la piel del volante, que es de mucha calidad y lo notas al tacto, aunque hubiéramos preferido Alcantara para un mejor agarre. Hay que decir que la piel auténtica es un material que dura mucho y que es más caro que otros, por lo que esto puede explicar un precio tan elevado.

Uno de los añadidos en los que se han centrado con este producto es el "Depth Feedback", que se consigue mediante un altavoz al fondo de la base que nos recuerda a Simvibe, pero en GT Sport funciona automáticamente y no necesitas periféricos extra. Esto hace que el volante vibre suavemente cuando pisas los pianos (también se combina con el force feedback) y es algo que nos ha encantado. De hecho, nos ha gustado tanto que pretendemos invertir en un dispositivo Simvibe para nuestro volante Clubsport de PC, en el que hemos estado muchas horas jugando a una versión de Assetto Corsa llena de mods.

El volante lleva doce botones además de la cruceta y dos sticks analógicos, por lo que es muy sencillo manejar el modo foto de GT Sport o usar el editor de diseños. Si lo comparamos con el funcionamiento del CSL Elite PS4 son como la noche y el día, por mucho que Fanatec nos ofrezca la opción de cambiar los botones del volante.

Los pedales, sin embargo, no están a la altura, ya que, aunque parece que van bien cuando ajustas la resistencia en el pedal y calibras el acelerador, se quedan por debajo comparados con la calidad del volante. También nos gustaría que el volante fuese más grande, ya que con 28 cm se nos queda pequeño comparado con los 30 cm que Fanatec lleva ofreciendo unos años ya. Según tenemos entendido, el tamaño fue a petición de Yamauchi y de Polyphony.

Si vas a pasarte muchas horas jugando a Gran Turismo Sport, entonces te recomendamos el T-GT. Thrustmaster no ha sacado nunca un volante tan bueno y, aunque los pedales se queden algo cortos, el paquete entero funciona tan bien en el último juego de conducción de Sony, que no podemos sino alabarlo. Es sin duda la mejor manera de jugar a Gran Turismo Sport hoy por hoy, aunque el precio pueda doler.